
Hay veces que uno reflexiona y llega a conclusiones. Una reflexión que he tenido recientemente es: no tiene demasiado sentido escribir sobre algo que ha sucedido hace demasiado tiempo. Un ejemplo es este: una persona que narra estúpidamente unas vacaciones que acabaron hace ahora un mes.
Uno podría precisamente desdibujarlo, engañarse utilizando el aniversario como excusa. Pero no pasaría de ser una excusa. Supongo que lo escribo por el mismo motivo que puedo pasar semanas enteras sin trazar una línea en un bloc y luego, de buenas a primeras, cuando menos me lo espero, me descubro nervioso buscando plumas o papeles o ordenadores con páginas virtuales en blanco. Puede que no me lleve a ninguna parte, pero es el camino que voy escogiendo, y eso ya es bastante.
Túnez tiene una catedral (en realidad tiene varias, dos por lo menos, pero esta, por decirlo de algún modo, funciona). Está junto a la avenida de Francia, pero todavía en la avenida de Habib Bourguiba. Se encaja entre edificios, discreta. Pero se deja notar con sus dos torres gemelas coronadas en cúpula.
Entramos. Diana quería entrar y a mí me pareció una buena idea. Dentro había casi solamente turistas. Algunos fieles se arrodillaban rezaban en la semioscuridad. Las velas, derritiéndose, ponían cara de huevo frito que se olvidaen una sarténmucho tiempo.
1 comentario:
Velas con cara de huevro frito que se olvidan en una sárten???!!!
Buenísimo...Tu blog es lo más gastronómico que hay. Da gusto venir aquí a comer.
Publicar un comentario